Cuando era chico ame el estar en contacto con la naturaleza, miraba el cielo estrellado y muchas preguntas inundaban mi cabeza, a las cuales no le encontraba respuesta. También, alguna vez frente a un espejo, me mire fijo a los ojos y me pregunte… “¿Quién soy?”, la sensación que tuve en ese momento, fue como estar buceando en el inmenso universo. (no respondí a esa pregunta). J. Bucay dice “un buscador no precisamente encuentra”. Bajo esta frase me considero un buscador. Ser buscador me llevo a incursionar por diversos deportes, como futbol, handbol, vóley, maratonista; hacer teatro, bailar folklore, tango, clásico, jazz, salsa y bachata, gracias a la danza tuve la oportunidad de pisar muchos escenarios y viajar dentro y fuera de la Argentina. Estudiar Humanidades, agronomía, apicultura, gastronomía. Estar en ese estado de buscador me llevo a encontrarme con un curso de “Coaching Psicológico Integral”, EL cual me ayudo a que la búsqueda siguiera con más intensidad, pero ahora el rumbo era mi interior. Hoy ya grande sigo viendo el mundo con los ojos de aquel niño que solo deseaba buscar y descubrir algo nuevo.